Los 200 km fueron de Chevrolet

Pasaron los 200 km del Súper Tc 2000 por el autódromo “Oscar & Juan Gálvez” de la ciudad de Bs.As.

Fue positivo el regreso de la categoría a Bs.As. Recuperó el Súper Tc 2000 la plaza ideal para “La carrera del año”. En esta oportunidad el equipo Chevrolet fue el ganador de la mano de la dupla Agustín Canapino & Guillermo Ortelli.

Se optó por el circuito N° 9 con la bajada del tobogán, uno de los circuitos más completos del país.

Tal vez, pensando a futuro, creo que el circuito N° 15 es el ideal para estas carreras especiales.

Los autos “volaron”, José Manuel Urcera / Valdeno Brito (Fiat Linea) marcaron 1’17”880 en clasificación a un promedio de 154.992 km/h.

La carrera fue muy atractiva, desde el inicio, con la pelea por la punta entre el Brasileño Brito y Guillermo Ortelli. Luego la lluvia que desarmo la fila india y abrió las posibilidades a todos a pelear por la carrera, que fue emocionante hasta la bandera a cuadros.

Destacamos el excelente trabajo en boxes de los equipos, salió todo perfecto, más teniendo en cuenta que debieron ingresar a boxes sorpresivamente todos juntos por las inclemencias del tiempo.

Por suerte, el Súper Tc 2000 llegó al autódromo porteño y esperemos que esta vez ya sea para quedarse como escenario de las próximas ediciones de los 200 km.

Algunos temas a mejorar para las siguientes ediciones, parece ser que no puede resolver las comodidades para el público. Van pasando los años y las presentaciones de esta mítica carrera y siempre sucede lo mismo. Las tribunas permanecieron cerradas durante todo el sábado, incomodando al público presente e incluso haciéndolos pensar en volver el domingo y encontrarse nuevamente con ese panorama. Solo las tribunas de las plateas abiertas.

La verdad, no se entiende el porque, tal vez para la organización sea un tema menor, porque todos sus esfuerzos están centrados en la organización del evento. No se olviden, que el público es una parte fundamental del evento, que acompaña permanentemente al automovilismo argentino.

Y cuesta que nuestro querido automovilismo lo tenga en cuenta.

No se olviden que el público que está detrás del alambrado es lo que mantiene vivo al automovilismo profesional. Sin interés del público, no hay interés de las empresas. Y sabemos muy bien, que si no hay interés es imposible mantener vivo automovilismo a nivel profesional.

Diego A Fernandez

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 


 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
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